Tras previo desayuno en la venta El Navasillo, 16 integrantes del club nos dimos cita para realizar por primera vez la ascensión del Jarastepar (1.427 m.) macizo calcáreo que se encuentra en un corredor central entre los parques nacionales de Grazalema y la Sierra de las Nieves.
Un par de kilómetros más delante de dicha venta hay un desvío del lado izquierdo que nos llevara dirección Juzcar un poco antes de llegar al pueblo pitufo justo en el camino a Ronda hay un cartel por donde indica “los Riscos” girando a la derecha hay una nave industrial, seguimos adelante dejando los coches estacionados en un parking habilitado para recorrer los riscos de Cartajima.
Bien abrigados nos dirigimos a pie por el carril que entronca con este camino pasando una angarilla continuamos unos metros más con un total de casi dos kilómetros para comenzar nuestro ascenso campo través en paralelo con la vaya, aprovechando los pocos caminos de ovejas que por momentos se dejaban ver, continuamos subiendo progresiva y escalonadamente en busca de la cumbre del Cerro del Tajo de las Semillas (1.194 m.) pasando después a mirar de cerca la sima que lleva el mismo nombre y por donde se filtra el agua de lluvia.
Comentar que toda la progresión de esta maravillosa ruta será lenta y de sumo cuidado desde el principio, ya que el afilado lapiaz continuo y piedras suelta dificultará el tránsito aunado la precipitación aunque débil ha humedecido las piedras pringosas de barro de nuestras respectivas pisadas.
A nuestras espaldas logramos tener una panorámica casi completa del valle del Genal Júzcar, Alpandeire, Benarrabá, Algatocín, Benalauría, Benadalid, Cortes, Jimera de Libar y del lado derecho los famosos riscos.
A partir de este cerro y traspasar una vaya sin dificultad, nos encontramos en fincas privadas, por lo que habrá que ser lo más respetuoso posible. E inmediatamente Iniciamos un precioso ascenso por la cuerda caliza, con estupendas panorámicas que deberíamos de tener del Valle del Genal y los Macizos de Líbar y de Grazalema pero lamentándolo el día no se ha prestado para ello pues entre la llovizna calabobos y la niebla nos lo han impedido.
Continuamos nuestro recorrido pasando por un tramo de Lapiaces muy marcadas y profundas que puso a prueba nuestro equilibrio andando con cierto ritmo de piedra en piedra en un terreno totalmente kárstico a unos 700 m adelante pasamos otra vaya también si dificultad alguna siempre con ayuda de una mano amiga.
Ya El siguiente punto es el vértice geodésico Jarastepar 1.427 metros. situado en plena meseta de esta gran loma caliza la segunda cota de la Sierra del Oreganal, siguiéndole el Cancho de Almola (1.406 m.). Desde este enclave, la vista alcanzaría en el horizonte, desde la Sierra del Aljibe en Cádiz al suroeste, los Macizos de Líbar y de Grazalema al oeste, Sierra Bermeja al sur y la Sierra de las Nieves al este en Málaga, hasta la Sierra del Tablón al norte en Sevilla. Se divisan tres provincias y la costa africana más allá del Estrecho de Gibraltar, entre otros pero hoy no es el caso.
Al encontrarse el vértice centrado en esta gran plataforma de poca vegetación, siendo los Piornos o cojines de Monja los protagonistas en estas alturas comentar que las vistas hacia la vertiente norte no son idóneas, por esto, unos metros adelante se encuentra un mirador natural donde se obtienen fabulosas vistas de Ronda y su tajo aunque nosotros no fuimos ya que la bruma lo impedía, así después del dicho reportaje fotográfico comenzamos el regreso por el mismo sito. Ya bajando la zona de los Lapiaces más pronunciadas nos resguardamos con la pared de piedra del viento, para comer todos juntos y continuar descendiendo cada uno a su ritmo con niebla, viento y lluvia tratando de reagruparnos para no perdernos de vista en una fuerte bajada evitando en lo posible las rocas planas que son las más resbaladizas que provocaron uno que otro patinazos y batacazos, nada que no se pueda mejorar con una chupada de ibuprofeno y un buen masaje.
Y por fin llegamos al carril nuevamente, para pisar llano; Algunos suspiros de alivio se hicieron notar entre sonrisas y caritas alegres……. Eso sí, con muchas ganas de llegar a los vehículos y cambiarnos de ropa ya que el barro y la lluvia se hicieron notar en gran parte del cuerpo.
Ya cambiados y abrigados nuevamente fuimos a tomar el cafelito quita fríos a la misma venta para continuar el camino a casa.